El Pirineo catalán es un destino ideal para gozar de las actividades de nieve y una oportunidad única para descubrir la Cataluña nevada. Como siempre, te recomiendo alquilar un coche para que puedas descubrir plácidamente sus bellos paisajes nevados.
Tierra de clima benigno, además del tradicional esquí ofrece al visitante un completo conjunto de propuestas activas para ser disfrutadas en mágicos paisajes.
En la Cerdanya, por ejemplo, el esquí de montaña, las travesías con raquetas de nieve o los recorridos en motos de nieve –siguiendo siempre las regulaciones del Departament de Medi Ambient de la Generalitat– nos permiten disfrutar de toda una aventura vestida de blanco.
Un tesoro paisajístico se abre ante nuestros ojos al entrar al valle de Camprodon (Ripollès). Territorio pirenaico del sector oriental, durante décadas ha sido meca para veraneantes y una buena opción para los amantes de los deportes de invierno. Las excursiones con raquetas de nieve por las montañas y los picos que rodean a este valle pueden ser desde paseos en llano hasta ascensiones a cimas de más de 2.800 m.
Espectacular paraje de alta montaña, el valle de Núria ofrece en invierno actividades como el esquí de montaña o las raquetas de nieve. Pero tendrás que dejar aparcado tu coche de alquiler para llegar, pues sólo se puede acceder a él caminando o mediante el silencioso tren cremallera. En la modalidad de esquí de montaña no puede obviarse el tramo catalán de la Alta Ruta Pirenaica, una magnífica travesía que va desde el Canigó hasta Navarra.
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