Una buena razón para viajar son las múltiples fiestas que constantemente se celebran en las ciudades y pueblos españoles. Una excelente oportunidad la encontraremos en la Fiesta de San Antonio Abad, en Mallorca.
La fiesta empieza el 16 de enero por la tarde, y prácticamente toda la isla se vuelca en estas fiestas. Sin desmerecer las celebraciones de otros pueblos, las más concurridas son las de Sa Pobla, Artà, Pollença, Muro y Manacor.
Una buena idea es alquilar un coche en el aeropuerto de Mallorca. En Mallorca las distancias no son muchas, por lo que un coche de alquiler te permitirá disfrutar de la fiesta en diferentes lugares.
El prendimiento de las hogueras marca el inicio de las celebraciones, las cuales son acompañadas con cánticos populares y disfraces folklóricos de los lugareños. Los pueblos se reúnen entonces a comer empanadillas de acelga y pescado mientras los “demonios” brincan de hoguera en hoguera.
Al día siguiente se suele buscar –en medio de la resaca- un pino alto y robusto en alguna de las fincas designadas. Una vez encontrado, se procede a su tala, luego de lo cual se comparte una exquisita comida campestre a base de arenques, pan, tomate, aceite y el infaltable vino balear. Cargados de energía, los designados levantan el pino talado y lo llevan hasta la Plaza Vella donde es levantado nuevamente con gran esfuerzo frente a la iglesia.
Una vez erigido, se le embadurna con jabón y huevo y la diversión consiste en tratar de trepar por él para alcanzar un gallo que es el premio. Luego de toda esta diversión, se suele asistir a un simpático desfile de carrozas y a la acostumbrada bendición de los animales domésticos.
Las fiestas de San Antonio Abad culminan el 20 de Enero por lo que, si aún quedan fuerzas, podemos empalmar con las fiestas de San Sebastián en la capital Palma de Mallorca.
domingo, 31 de enero de 2010
Agaete y el dedo de Dios
Algunos viajeros nos inclinamos por descubrir nuevos espacios naturales porque nos seduce el contacto con la naturaleza en cualquiera de sus ecosistemas, más ahora que el delicado equilibrio del ecosistema está siendo afectado y marcha hacia una merma de manera inexorable. A otros, les interesa más realizar visitas culturales en algún museo, pinacoteca o un recorrido por monumentos históricos. Cuestión de gustos.
¿Y por qué no una combinación de ambas cosas? En la localidad de Agaete, hacia el norte de Gran Canaria, combina historia y naturaleza ofreciéndonos la oportunidad de conocer algo nuevo y dejar a un lado destinos más conocidos y masivos como Maspalomas, Mogán o Playa del Inglés, por citar algunos de los más importantes destinos turísticos en Gran Canaria.
En Agaete desembarcó el ejército castellano para hacerse con la isla de Gran Canaria en el siglo XV, mismo lugar que mucho antes había sido referencia para los aborígenes guanches: "El lugar de la salida y la puesta del sol".
La formación natural más representativa de Agaete es el llamado Dedo de Dios. Se trata de una formación rocosa del tipo basáltica que queda al pie de un acantilado que cuenta más de 300 000 años de antigüedad.
Fuertes vientos y corrientes marinas fueron erosionando el acantilado hasta darle la forma de un dedo que apunta hacia arriba, al menos hasta antes de la tormenta de 2005 que se llevó los 20 metros superiores, restándole validez al nombre con que fuera bautizado hace ya tanto tiempo. Conocido ahora también como el Roque Partido, sigue siendo un lugar digno de ser apreciado para los amantes de la naturaleza.
Si has llegado a la isla en avión, bien puedes alquilar un coche en el aeropuerto de Gran Canaria que te permita complementar esta visita con la de otros espacios naturales no menos interesantes como el Parque Natural Tamadaba, de origen volcánico, en el cual podemos hacer excelentes excursiones o disfrutar de los pueblos aledaños y su apetitosa cocina. Agradecerás el coche de alquiler para hacer turismo rural en los valles que rodean a la zona y que ofrecen un refrescante aroma a pino sobre todo en los amaneceres.
En cuanto a las visitas culturales, no te pierdas la necrópolis y la Ermita de las Nieves.
¿Y por qué no una combinación de ambas cosas? En la localidad de Agaete, hacia el norte de Gran Canaria, combina historia y naturaleza ofreciéndonos la oportunidad de conocer algo nuevo y dejar a un lado destinos más conocidos y masivos como Maspalomas, Mogán o Playa del Inglés, por citar algunos de los más importantes destinos turísticos en Gran Canaria.
En Agaete desembarcó el ejército castellano para hacerse con la isla de Gran Canaria en el siglo XV, mismo lugar que mucho antes había sido referencia para los aborígenes guanches: "El lugar de la salida y la puesta del sol".
La formación natural más representativa de Agaete es el llamado Dedo de Dios. Se trata de una formación rocosa del tipo basáltica que queda al pie de un acantilado que cuenta más de 300 000 años de antigüedad.
Fuertes vientos y corrientes marinas fueron erosionando el acantilado hasta darle la forma de un dedo que apunta hacia arriba, al menos hasta antes de la tormenta de 2005 que se llevó los 20 metros superiores, restándole validez al nombre con que fuera bautizado hace ya tanto tiempo. Conocido ahora también como el Roque Partido, sigue siendo un lugar digno de ser apreciado para los amantes de la naturaleza.
Si has llegado a la isla en avión, bien puedes alquilar un coche en el aeropuerto de Gran Canaria que te permita complementar esta visita con la de otros espacios naturales no menos interesantes como el Parque Natural Tamadaba, de origen volcánico, en el cual podemos hacer excelentes excursiones o disfrutar de los pueblos aledaños y su apetitosa cocina. Agradecerás el coche de alquiler para hacer turismo rural en los valles que rodean a la zona y que ofrecen un refrescante aroma a pino sobre todo en los amaneceres.
En cuanto a las visitas culturales, no te pierdas la necrópolis y la Ermita de las Nieves.
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